Ahora conozcamos, cual es la tradición del pueblo
Pungaleño que gracias a la instrucción religiosa en la Fe Católica ha mantenido
siempre acerca de la aparición de la Virgen del Rosario de la Peña: “Se dice
que, en los primeros años de la colonia, había una niña huérfana de madre, que
vivía a órdenes de su madrastra la cual mandaba a su hijastra que era muy dócil
y abnegada apacentar un rebaño de ovejas, además de cuidar la manada tenía que
entregar una tarea de hilo de lana, que su madrastra le mandaba para que
hilara, la pastorcita con humildad y cuidado, cumplía todos los días la tarea
que recibía. Cierta vez, su madrastra vio sorprendida que a pesar de haberle
dado mayor tarea, siempre le traía terminado y con una calidad de hilo
admirable, entonces no pudo resistir a su curiosidad y preguntó a la pastorcita
¿cómo hacía tanto trabajo y con una perfección admirable? A lo que la
pastorcita le hizo saber: que una bella señora que marcaba a un niñito venía
todos los días a pasar con ella y le ayudaba a hilar.
Le siguieron a aquella pastorcita a fin de
satisfacer su curiosidad, más no vieron a nadie.
Siguió la pastorcita muy contenta, siempre
desempeñando su tarea, cierto día indicó que la señora que le ayudaba le ha
manifestado que se quedará en la piedra, luego fue a ver y observó la figura de
la señora que tantas veces le acompañaba y le ayudaba a hilar. ¿Posiblemente
cuando ya el Padre Pedro Bedón y Pineda habría pintado a la Virgen del Rosario
de la Peña?
Tal vez fue la primera que vio con sorpresa lo que
la Virgen le indicó. (Aquí).
En la Revista No. 6 de la Casa de la Cultura
Ecuatoriana Núcleo del Chimborazo, el Sr. Alfredo Costales Cevallos escribe un
artículo que dice: “Síntesis Biográfica del Padre Pedro Mercado”, y en un
acápite de esta Biografía dice: “Riobamba, desde los albores de su fundación,
fue la cuna indiscutible del saber y de la virtud, ya en 1556 florecía Fray
Pedro Bedón y Pineda, de la orden Dominicana, el mismo que fundó la Escuela
Quiteña en el arte pictórico, que tanta fama y lustre dio a nuestra Patria.
Cuadros pictóricos de gran valía como el de la Virgen de la Peña en Pungalá, la
Virgen de la Escalera en el Convento de Quito y la Virgen de las Lajas en
Ipiales – Colombia, nos habla con elocuencia de la capacidad y el arte del
Padre Bedón y Pineda”.
Fuente: Pasado y presente, Sr. Leonardo E. Velasco Montesdeoca
Fuente: Pasado y presente, Sr. Leonardo E. Velasco Montesdeoca
No hay comentarios:
Publicar un comentario